En “Cónclave” (2024), Edward Berger nos sumerge en uno de los escenarios más enigmáticos y herméticos del mundo contemporáneo: la elección de un nuevo Papa. Con una puesta en escena sobria pero cargada de tensión, la película sitúa en el interior del Vaticano una apasionante intriga donde se cruzan la fe y el poder. Este coloquio propone una reflexión sobre cómo el cine ha imaginado el universo eclesiástico y espiritual desde la curiosidad por su lado oculto y misterioso. A través de esta cinta y otras obras clave del cine religioso, explicaremos cómo se filma lo sagrado, lo institucional y lo humano en contextos donde el silencio y la mirada pesan tanto como la palabra.