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El ciclo Jardines Históricos pretende mostrar la importancia de los jardines históricos, una fusión entre arquitectura y naturaleza, convertida en grandes diseños paisajísticos que han permanecido intactos a lo largo de los años, transformándose en lugares llenos de historia y arte.

Se realizarán visitas guiadas dentro de los propios jardines, hechas por especialistas en la materia, que nos adentrarán en el mundo histórico y paisajístico del propio jardín, conociendo in situ, todo su significado. En esta ocasión, se dará a conocer el Jardín de Santos de Penàguila, un jardín histórico-artístico del siglo XIX y uno de los últimos jardines románticos de la época que se pueden encontrar en toda la Comunidad Valenciana. La actividad se hará a través de una visita guiada donde cronista de Penàguila Marc Baldó Lacomba nos explicará la historia del jardín, por qué se construyó y su gran diversidad botánica. Un jardín de ensueño que transporta al visitante a otra época.

Jardín de Santos de Penàguila

Joaquín Rico i Soler, acaudalado terrateniente de Penàguila y hombre ilustrado, con grandes dotes para la botánica, diseñó un jardín de estilo neoclásico hacia 1850 en una finca rústica que poseía su familia desde finales del siglo anterior. Lo concibió a imagen y semejanza de los majestuosos vergeles de La Granja de San Ildefonso, en Segovia, y de Aranjuez, en Madrid, considerados Patrimonio de la Humanidad, y el resultado final fue espectacular. El Jardín de Santos es un gran edén vegetal de especial interés y singularidad, ubicado en plena montaña alicantina, dentro de un recinto vallado y comunicado con el pueblo a través de un paseo de cipreses de singular belleza. Contiene un gran abanico de árboles de grandes dimensiones con un gran valor paisajístico sin olvidar, el abanico multicolor de flores, que hacen más atractivo el paseo y reflejan el amor a la naturaleza por su creador. Las jardineras laterales que llevan hasta la pérgola dan la bienvenida al visitante que, en su recorrido, recala en un espléndido jardín con diferentes especies vegetales y maravillosas sorpresas ornamentales como el laberinto, uno de los mayores atractivos del paraje, diseñado con setos de cipreses de gran altura y un majestuoso cedro central. La gran alberca de estilo andaluz, con un surtidor central, da paso a fuentes, estatuas mitológicas y parterres que culminan con una romántica pajarera.

El conferenciante: Marc Baldó Lacomba

Catedrático de Historia Contemporánea por la Universidad de Valencia y Cronista Oficial de Penàguila.